domingo, 9 de febrero de 2025

Cónclave

 

Dir. Edward Berger

Reparto: Ralph Fiennes, Isabela Rosellini, Stanley Tucci

Reino Unido, 2024, 115 minutos








Los príncipes de las tinieblas
La iglesia católica es la única institución capaz de estar pensando en la salvación de un cura pederasta mientras un menor de 9 años le hace una felación. Así lo explica de claro el protagonista, el Decano del cónclave, a la hora de elegir nuevo papa, cuando afirma que todos pecan, todos dudan, incluso Jesucristo, pero que todo se perdona y la fe los devuelve al seno de la iglesia. Como si tal cosa.

El espectador va a vislumbrar aspectos semi secretos del Vaticano, de sus dormitorios como nichos, de las votaciones medio secretas, de rituales con dos mil años de antigüedad en un marco tan apabullante, aunque algunos sean digitales, que pesan como una losa bajo la que yace un amigo. 

Y el espectador encuentra en la última parte del metraje unos despropósitos que acaban con la magnífica fotografía tenebrista, la apasionante interpretación de Ralph Fiennes e Isabela Rosellini y el frufru de las exquisitas vestimentas purpurinas de sus eminencias. Todo entre bombas fundamentalistas y extraños hermafroditas que aspiran al trono.

Por cierto, el verdadero príncipe de las tinieblas fue Gordon Willis, autor de la fotografía de El Padrino I y II, Klute, Manhattan, y otras obras maestras de la luz cenital, con escenas susurradas a contraluz y planos casi desnudos.

"No más secretos" dice el Decano de los cardenales en una escena. Nunca he querido que nadie me cuente los suyos. Que cada uno cargue con sus piedras, como cargan ellos con sus pesados crucifijos pendiendo socarrones sobre sus casullas.
alfonso