Dirección: Georges Clooney
Reparto: George Clooney, Felicity Jones, David Oyelowo...
EE.UU. 2020, 118 minutos
Netflix
Georges Clooney encadenado
Se sabe que la paternidad y el matrimonio nubla la mente, agarrota el intelecto, engorda la barriga y produce alopecia... entre otros males. No se sabía de sus letales efectos sobre el cine. Así, el ex soltero de oro, director de Buenas noches y buena suerte, Los Idus de marzo y protagonista destacado de tantas películas, deviene en muñidor de engendros como este donde todo es políticamente correcto, y nos ilustra sobre el clima, la raza, las mujeres... mientras al abuelo se le cae la baba con su hija-nieta, una especie que prolifera ampliamente en las parejas hastiadas a los cuarenta y tantos de viajar a ninguna parte y asistir a comedias de humoristas casposos que cuentan chistes verdes.
La puesta en escena es graciosa porque parece sacada del catálogo de Ikea edición 2049. Los efectos especiales y algunas escenas y planos son una versión rijosa de los Clicks de Famobil y la banda sonora del siempre efectivo Alexandre Desplat, parece aquí la música de la sala de espera de un dentista a punto de anunciar que se le ha acabado la anestesia.
De la levísima historia sobre el cambio climático, del comandante, genio autoproclamado de las matemáticas y de las escenas del impacto con los meteoritos compradas en un Outlet de Gravity cuando Clooney pasaba por allí, mejor ni hablamos.
Estrenada en Netflix -al fin una película digna de su catálogo general-, el día de Nochebuena, rima estupendamente con esta quizá nuestra Última Cena, con Judas a punto de rematar su trabajo de acabar con la raza humana, para solaz y esparcimiento de las otras especies del planeta.
alfonso