lunes, 24 de junio de 2013

El Régimen del Pienso

 La Zaranda
 Dir. Paco de la Zaranda
 Act. Luis Enrique Bustos, Gaspar Campuzano, Paco Sánchez y Javier Semprún


CDN, Teatro María Guerrero

Andalucía la Baja, 2013
El Pienso del Régimen
Vuelve La Zaranda a Madrid, esta vez al María Guerrero, en un patio de butacas medio vacío por el IVA y el fútbol, políticas de la venganza del Régimen contra los siempre incómodos cómicos.

Y vuelve con todos sus elementos ya clásicos, con la misma mezcla del nihilismo de Beckett, el ensimismamiento espectral de Tadeuz Kantor y el laberinto onírico de  Kafka, aderezados de esperpento hispano con acento andaluz y una dinamita que remeda lo que Thomas Bernhard decía de Austria, "Este país huele a cerdo".

Como siempre, La Zaranda crea una potente dramaturgia a base de una descarnada iluminación y la subversión de los objetos más cotidianos que entre sus parlamentos pierden su inocencia y se adornan de un aire fantasmal algo siniestro.

Esta vez la situación -real- de la calle les gana y ceden protagonismo al cesante, a la víctima de las tropelías, lo que hace que la obra pierda algo de su magia y el discurso, paradójicamente, parte de su esencia. 

Y como se dice repetidamente por megafonía antes de comenzar la función: "Todos nuestros operadores están ocupados, por favor permanezcan a la escucha". 

O bien "Se matan entre ellos porque se les acaba el pienso; cuando les sobra, se matan solos; y al que está enfermo, lo matan entre todos".
alfonso

sábado, 22 de junio de 2013

Hannah Arendt

 Dir. Margarethe Von Trotta
Act. Barbara Sukowa, Axel Milberg, Janet Mcteer...





Alemania, 2013




¡¡Doctor exijo que me castre!!
Plúmbea película sobre la filósofa alemana y su papel en el juicio contra Adolf Eichman en Jesusalem, que puede servir también de paradoja sobre Alemania y los alemanes y sobre el propio film, porque a pesar de lo pesado de su mecanismo y su narrativa es francamente interesante.

La filósofa y pensadora, amante del único pensador nazi de envergadura, Martin Heidegger, convenientemente reconvertido tras la posguerra, se plantea la teoría de la banalidad del mal, sobre la incapacidad de los sujetos no pensantes de ser responsables de las atrocidades que cometen, aunque tengan que pagar por ello. Teoría arriesgada que puede dar pie al manoseado argumento de la obediencia debida, tan caro a los perfectos burócratas alemanes cabezas cuadradas, y a otros esbirros de dictaduras más imaginativas. La película cuenta también la tremenda polémica que causaron sus escritos en The New Yorker, su rebelde manera de pensar y su duda metódica.

Lenta, pesada como un elefante con botas de montaña, correcta, fría y aburrida, sumamente interesante, la directora alemana, (Rosa Luxemburgo, Las hermanas alemanas...) no ha debido caer en el parecido de la actriz con Merkel en su segunda conquista triunfal de Europa en apenas 75 años.

Y concluyo. Al día siguiente, el paciente, alemán veraneante en Mallorca, se encuentra con un amigo y compatriota que le pregunta si ya se había vacunado.
"Esa ser palabra que andaba buscando..."
alfonso

sábado, 15 de junio de 2013

Con la pata quebrada

 Dirección y guión: Diego Galán

 España, 2013

De aquellos polvos, estos lodos
Un documental bien montado sobre el tratamiento de la mujer en el cine español desde el sonoro, principios de los años 30, a nuestros días, en que parece que todo vuelve a repetirse. No hay más que ver a la Cospedal con mantilla y peineta que parece recién salida de la Sección Femenina de ovarios de plomo, o al siniestro Gallardón predicando contra el aborto cual arzobispo Gomá, fascista y pedófilo con halitosis.

Lástima que probablemente de la mano de los productores, Almodóvar y Cerezo, lo que podía ser dinamita se queda en fuegos de artificio, carece de chispa y mordiente y pierde su cualidad atroz para quedarse en anécdota de "¡Que tiempos aquellos!", prima hermana de la pegajosa Cuéntame.

O sea que en vez de escalofrío nos quedamos en temblorcillo, aunque recordemos, yo al menos, los casposos años 60 y 70 en que los hombres de este país vieron atónitos cómo la mujer se alejaba de sus patéticos dominios de moritos de boina y patillas. Algunas todavía lo están pagando.
alfonso


viernes, 14 de junio de 2013

Un invierno en la playa

Dir. Josh Boone
Act. Greg Kinnear, Jennifer Connelly, Lily Collins


EE.UU, 2012
Love them & Leave them
Me refiero a este tipo de películas. No como decía el que acuñó la frase, un conocido, buen amigo, pelín amargado, que en el norte de Inglaterra compartiendo unas pintas, se refería así a las relaciones con las mujeres. Que tampoco. Son esas películas que te gustan mientras las ves y luego las olvidas como un mal pensamiento yerto en una playa de invierno, precisamente. 

De los tres títulos, me quedo con el último, Writers, Escritores, mejor que Borrachos de amor, o el oficial en este imaginativo país, Un invierno en la playa. Para que nos divierta durante su proyección basta con su buen guión, sus excelentes diálogos y su sobresaliente banda sonora a cargo sobre todo de Bright Eyes, con un tema que destaca sobre los demás, Between the bars.

Pero luego el canto a la familia se marchita a pesar del buen hacer del guión, y la historia de los adolescentes funciona mejor que la de los helados adultos, porque como dice el gran Yuri Herrera "Makina no tenía ni idea a qué se refería la gente que se decía decente cuando hablaba de la Familia. Ella había conocido familias truncas, ampliadas, amargas, cordiales, ladinas, lúgubres, hospitalarias, ambiciosas, pero nunca había conocido a esa Familia Feliz de la que tanto hablaban y que tantos juraban defender". Señales que precederán al fin del mundo.
Yo tampoco...
alfonso

sábado, 1 de junio de 2013

Muda

 Autor y director: Pablo Messiez
 Act. Fernanda Orazi, Marianela Pensado, Óscar   Velado.
Si no fuera por Emiliana...
Teatro independiente en la coqueta sala El Sol de York, -harían falta muchas más salas como estas-, dicen los entendidos que de la pura escuela argentina o, mejor dicho, porteña. A uno le parece excesivamente anoréxica la dramaturgia, la iluminación, el vestuario, la propuesta... Se compensa sin duda con el texto, con la palabra, que como bien dice su autor, es lo único que nos salva. Eso y la música, Ute Lemper quizá, Estrellita Castro probablemente...

Con esos escuálidos materiales se construye una obra pequeña que crece merced al estupendo trabajo de Fernanda Orazi, que nos alegra la función y hace reír al respetable, a veces algo pasado de risas, aunque  se entienda que tal y como están los tiempos, querramos sacar risas de cualquier excusa.

Pero la obra no acaba de funcionar, carece de peso argumental, con algunos hilos sueltos que se pierden como nubes de verano, que amagan pero no llegan, faltos de gravedad absoluta.

Al final, algo desorientados nos queda, nos quedamos, con la palabra, y gracias a Fernanda no nos quedamos sin embargo, con las ganas de tomar café. (Bis)
alfonso