Dir. Michael R. Roskam
Act. Tom Hardy, James Gandolfini, Noomi Rapace...
EE.UU 2014, 106 minutos
La cara oscura de la luna
alfonso
Act. Tom Hardy, James Gandolfini, Noomi Rapace...
EE.UU 2014, 106 minutos
La cara oscura de la luna
No es el Nueva York de Woody Allen, ni el plató de cine tantas veces reseñado que llevamos cargado en la memoria RAM, son los callejones mugrientos y las casas unifamiliares de Brooklyn, sucias por la nieve y la corrupción cotidiana, que albergan una violencia callada que hace que la película pueda llegar a ser desagradable.
Reciente premio en San Sebastian al mejor guión, muy en la línea turbia de Dennis Lehane, Adiós pequeña, Mystic River, Shutter Island... vuelve a rendir culto al héroe esquinado de pocas palabras, -su vocabulario no debe llegar a las 500-, como el cretino, palillo en la boca, cazadora con escorpión amarillo, de Ryan Gossling en Drive, pero aquí le salva la interpretación poderosa de Tom Hardy, que se consagrará cuando haga un personaje distinto a esta y al de la magnífica Locke. También Gandolfini y Rapace pagan tributo a sus personajes haciendo de ellos mismos, el gordo por última vez desgraciadamente.
No es posible que Lehane trabaje tanto en películas, series y novelas sin su equipo de negros, esos que en inglés se llaman ghost writers, escritores fantasmas, pero se mueve como pez en el agua en las partes más sórdidas de las ciudades, su Boston natal y ahora Nueva York. Es una pena que haya dejado de lado sus historias sobre los anarquistas de principios del siglo XX exterminados por la represión, como Sacco y Vanzetti.
Como marca de la casa, el héroe taciturno protege a seres frágiles, casi siempre, tirando de tópicos, a mujeres. En esta lo hace además con un cachorrito. Lástima que, como el vecindario, sea de raza Pit Bull.
alfonso